NO SOY EL UNICO

La dura realidad, el optimismo veraniego deja paso al crudo realismo de la city...

Hoy debía caminar, dejar la vespa en casa y ganar un poco de tiempo al reloj. Para pensar (q mala idea la pensar)...

En mitad de la calle atestada de coches había una gaviota. Andando. Los coches frenaban, pero ella no sabía qué hacer, estaba perdida, la ciudad le confunde. Intenta batir sus alas, pero no consigue volar. La ciudad no es para ella, no es su medio. No entiende sus reglas, no respeta las señales, los semáforos, los ceda el paso...

Sin embargo no puede evitarlo, ha llegado a la sociedad, sin quererlo, pero esta allí...

Acostumbrarse o morir !

¿Curiosas imágenes reales?